Al despedirnos nos cogimos de la mano... como si fuésemos a seguir callejeando juntos, instantes después estábamos caminando en direcciones opuestas.
Me gustó sentir el tacto de la palma de su mano con la mía.
Mano templada y fuerte.
Unos abuelos paseaban con su nieta, hablaban de lo que harían en la playa. La niña cogió la mano de su abuela que acababa de extender la suya de manera instintiva para que su nieta la cogiese y seguir el paseo con la ternura y la paz de esas manos entrelazadas que solo transmitían amor.
Los novios, no hace tanto, le pedían la mano de su hija a los padres....
Nos saludamos, zanjamos disputas, cerramos tratos... con un apretón de manos....
El cura les dice a los feligreses "daos la paz" y estrechamos la mano del vecino como signo de fraternidad...
Me gustó darnos la mano....