Páginas

14 de enero de 2012

Pan Para Mí, Que Los Santos No comen

Ultimamente estoy empezando a entrar en confusión/conflicto mental con este serio tema de la crisis. 
Tengo la sospecha que a algunos y repito, a algunos, no les cae demasiado bien que la crisis no nos afecte a todos por igual y les molesta que a aquellos a los que el chaparrón les ha cogido un poquito más resguardados se "quejen" de las dificultades que están teniendo que superar.
Por supuesto que dentro de las desgracias hay grados y que muchos de nosotros aún pasándolas canutas somos unos privilegiados con respecto a otros....
Escucho voces de gente cercana que tacha de inapropiados o frívolos ciertos comentarios de algunos que todo lo que tenían antes de la crisis se lo ganaron con mucho esfuerzo y trabajo, que nadie les regaló nada y que a base de "simplemente" trabajar, consiguieron poder llevar y ofrecer a sus familias una vida bastante cómoda y holgada. Personas que nunca apostaron por la suerte, que nunca se les pasó por la mente eso de diosproveerá, que nunca vivieron por encima de sus posibilidades, aunque sí, y merecidamente, por encima de las de los que ahora les cuestionan que se permitan comentar que se lo están pasando mal solamente por que ellos se lo están pasando peor.
No se si somos un país de envidiosos, de egoístas, de superficiales, de insensibles o de qué, pero me chirría pensar que a algunos la puñetera crisis les está sirviendo de coartada para justificar sus disfrutados años de cigarra.
Y que cada uno viva como quiera y pueda, pero que no juzguen ahora a los que antes quisieron y pudieron elegir otra manera de vivir y que como a la mayoría este dificilísimo momento les ha obligado a reinventarse. 
A unos nos costará más que a otros pero creo que eso no nos da necesariamente más derecho a la pataleta.
Desahogarnos entre amigos y seguir trabajando, ser consecuentes y solidarios. Poco más se puede hacer ahora... 

1 comentario: