...a una silla pegada!
Como lo oís, si algún día paseando por Barcelona y en concreto por el barrio de Gràcia, os cruzáis con una mujer que lleva en brazos una silla, no lo dudéis soy yo....
Diría que desde este verano no he parado de restaurar sillas... Empecé con unas de mi hermana, que por horario le era más cómodo dejármelas en casa y como vivo cerquita del taller ahí me ves transportándolas a pié de un lado al otro, casi me daba vergüenza porque como eran varias parecía que siempre llevaba la misma. Después han ido llegando otras directamente al taller, una de ellas la del "ísimo", después otra tongada de dieciocho más... cuando creía que la cosa ya estaba, llega otro cliente con tres más, prácticamente iguales a las anteriores...
Bueno ahora sí, me digo, pero parece que no hay "tresincuatro", la silla del ordenador de casa hecha añicos... y como aquí se recupera todo, allá que voy, ésta de ida y vuelta claro...
Acabo de volver a dejarla en su sitio, "compuestayconovios"...
Es lo que tiene... a ver si ahora cambia el tránsito y me veis pegada a unas tantas cómodas!
Seguramente una silla le ha dicho a la otra !Qué bien te veo! y ésta le ha contestado: !Es que he estado en el spa de Helena! Y la primera ha pensado: !Pues paya que me voy!
ResponderEliminarNo hay mejor publicidad que el silla a silla
Juassssssss.. Cris! Oye y del isimo qué? Helena, hija que ni tiempo de leerte... y lo peor es esa sensación de inoperancia... Un fuerte abrazo
ResponderEliminarMis queridas Crises, buenos días y buen finde!
ResponderEliminarCristina, muy bueno, has estado muy aguda. Lástima que esto no tenga sonido, habrías escuchado mi carcajada.
Cris, poco o nada, silla pendiente de recoger, pero guapo lo es. Sí, te he echado en falta.
Besos en estéreo