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14 de abril de 2011

Parecía Tan Real...

Estoy en casa, en una cocina, con mi madre y mi hermana.  Llaman al teléfono y una voz extranjera, de mujer, me dice que tengo que hacer una transferencia para cubrir los gastos médicos de mi hermano, que está ingresado en un hospital de alguna ciudad del sur.
No entiendo que me dice, quiero saber más pero se corta la comunicación.
Por qué preguntan por mí si se trata de mi hermano?...
Busco esa ciudad en el mapa para localizar a ese hermano que resulta ser mi hijo...
Parto con rumbo incierto y aparezco en algún lugar del norte, en la montaña. Me acompañan dos amigas y nos guían unos amigos, pero que parece que no conozco ¿o sí?. 
Una de mis amigas juega a hacer ver que se cae por un terraplén del bosque y vuelve a aparecer riendo a modo de ¿os ha gustado mi broma?.
Yo quiero encontrar a mi hijo y el sendero nos conduce a las cercanías del pueblo dónde de niña pasaba mis vacaciones, que por cierto, no está en el norte, ni en el sur....

Me despierto intranquila pero por suerte mi hijo duerme plácidamente en su litera....

5 comentarios:

  1. Dicen que soñar que alguien está hospitalizado es un aviso de que su salud no está mu bien. Tu hijo debería hacerse un chequeo.

    Y respecto a tu amiga que hacia que se caía y sin asustarse puede indicar que afrontará sus problemas y logrará superarlos o también podrías ser tu.

    Me encanta interpretar los significados de los sueños, creo que es todo un mundo por descubrir que nos puede decir muchas cosas.

    Un beso guapa y buen finde!

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  2. Ay amore, no me asustes! Pensando en mi sueño creo que entiendo la asociación con mi vida despierta y lo que aquí parece extraño allí es tan natural... que curioso.

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  3. Qué maravilla, Helena. Me encanta este texto. Da vértigo y eso es buenísimo. Creo además, que podría ser un cuento, y que estaría muy bien que la madre, es decir, la narradora mantuviera la inquietud, la desesperación, pero al mismo tiempo, cierta maldad, algo oscuro que veo en tus líneas. Para mí la oscuridad es un lugar de delirio y vértigo. Y hay que caer, Helena, es preciso, tanto más cuanto que escribes así, o tal vez, sobre todo, cuando eres capaz de transmitir ese vértigo como tú lo haces. Mira, ahora pienso en otra novela para ti. "Crónicas del desamor" de Elena ferrante. Son tres novelas. La última se llama "la hija oscura". No sé por qué he pensado en ella al leerte. En todo caso, está muy bien que las cosas sean extrañas y naturales al mismo tiempo. A veces no nos damos cuenta. A veces no nos damos cuenta de casi nada. Qué suerte que estés tú para recordárnoslo.

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  4. Para decirlo de otro modo, para explicarlo de un modo análogo al sueño, para acercarme a esa rara belleza frente a la cual sólo puedo dejarme caer, ceder, no ofrecer ninguna resistencia; esa belleza que para mí es acuática, completamente acuática y que me inunda, se me ocurre mandarte esto:
    http://youtu.be/pNGhE9N4urM
    Míralo. Es para ti. La mejor compañía para el sueño.

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  5. Gracias Henry Vemberd (?), Koyaanisqatsi fué una de las películas "mito" de mi adolescencia pero no recordaba quién le había puesto música. Curioso que aquello que fue un grito de atención sobre el poder destructivo del hombre sea en este vídeo una poesía visual sobre su obra. Me encanta, yo también siento que no son conceptos incompatibles...
    Gracias de verdad, es muy bello y sugerente...

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