Acabo de descubrir que esa bolsa que tienen los pelícanos debajo de su enorme pico, no les sirve para almacenar alimentos. Su función es la de una red pero sin orificios, con lo que al pescar lo que más cogen es agua que la expulsan inmediatamente, se tragan la presa y siguen pescando.
De un tiempo a esta parte pensaba que yo misma estaba algo apelicanada e intuía que esta tendencia no me era demasiado saludable porque al no tragarme el pescado inmediatamente, se me iba quedando ahí atragantado y al final ya no servía para nada salvo para producirme un fuerte dolor de barriga si forzaba el trago o cierta hediondez cuando lo soltaba para afuera.
Me alivia saber que el pelícano tiene una inteligencia natural que yo desconocía y a partir de ahora haré como él:
Expulsaré lo que no me aporte nada antes de que se eche a perder y sólo me quedaré con aquello que me resulte saludable.
... no es Tiempo Perdido!
Expulsaré lo que no me aporte nada antes de que se eche a perder y sólo me quedaré con aquello que me resulte saludable.
... no es Tiempo Perdido!
No hay comentarios:
Publicar un comentario